viernes, 28 de septiembre de 2012

Robert Schumann

Robert Schumann (Zwickau , 8 de junio de 1810 - Endenich Bonn 29 de julio de 1856 ) . Fue un compositor Alemán de la época del Romanticismo, es incluso uno de los más grandes y representativos compositores de esta época.
Tanto en su vida como en su obra refleja su máxima expresión la naturaleza del Romanticismo, siempre envuelta en la pasión, el drama y, finalmente, la alegría. Schumann une la ilustración literaria con una gran complejidad musical, creando obras de gran intensidad lírica.
 
DATOS BIOGRÁFICOS:
 
Desde pequeño Schumann puso de manifiesto sus dotes musicales. Su padre, de profesión editor, le apoyó y le procuró un profesor de piano, es así como a los 7 años Schumann compuso sus primeras piezas musicales.
En esa etapa de su vida no sólo componía obras musicales, sino que también redactaba ensayos y poemas, y de hecho el joven Schumann se identifica tanto con la literatura como con la música. A los 14 años escribe un ensayo sobre la estética de la música. Desde que estudiaba en el colegio absorbe la obra de Schiller, Goethe, Lord Byron,  así como los dramaturgos de la Grecia Clásica. 
 
Su interés por la música había sido estimulado desde niño al escuchar tocar a Ignaz Moscheles en Carlsbad, y en 1827 a través de las obras de Franz Schubert y Felix Mendelssohn.
Su padre, que tanto había fomentado la educación de Robert como pianista y escritor, fallece en 1826; su madre no aprueba la dedicación a la carrera musical y en 1828 le envía a estudiar Derecho a la Universidad de Leipzig, sin embargo  Schuman no tardó en abandonar los estudios para consagrarse enteramente a su verdadera pasión, la música.

Hacia 1830, Schumann deseaba por encima de todo convertirse en un virtuoso y admiraba la ejecución de los más renombrados concertistas de su época, como el violinista Niccolò Paganini, y al también celebérrimo pianista Franz Liszt. Por tanto, Schumann, de innegable talento como pianista, se empleó a fondo en perfeccionar su técnica de teclado, hasta que una grave lesión en su mano derecha le obligaría a abandonar este camino y convertirse finalmente en uno de los más reconocidos compositores de su siglo.

Desde su adolescencia había compaginado sus diversas actividades y estudios con la composición  creando obras importantes, sobre todo para piano, pero también sinfónicas y de cámara. Desde ese momento se entrega con pasión a la composición, comienza a estudiar teoría con Heinrich Dorn, director de la ópera de Leipzig, y considera la posibilidad de escribir una ópera sobre Hamlet.

En paralelo a su nueva actividad como compositor, iniciaba su obra de crítico musical, que generó una abundante producción literaria. Su excepcional formación y aptitud literaria se plasmaban en críticas musicales, en las que, a través de personajes imaginarios, profundizaba en las obras de sus contemporáneos.
Su Opus 2 Papillons escrito en 1831 es un ejemplo excepcional de la fusión entre literatura y composición musical de Schumann. Se trata de una composición para piano, que consta de varias escenas de danza inspiradas en una fiesta de disfraces, cada danza trata de retratar a diferentes personajes y no guardan relación entre sí, excepto la última. Según escribiría el propio Schumann, está inspirada en la última escena de la obra Flegeljahre de Johann Paul Friedrich Richter y mezcla el carácter festivo con un extraordinario sentimiento melancólico.

La muerte en 1833 de su cuñada Rosalie y de su hermano Julius le causaron una crisis nerviosa. estas depresiones y periodos de reclusión completa fueron frecuentes en la vida de Schumann y se acentuaron a partir de 1834, continuando en aumento hasta su muerte (incluso llegando a escuchar voces y experimentar alucinaciones).

En el verano de 1834 se enamora de Ernestine von Fricken, una chica de 16 años con quien mantendría una breve relación que él mismo rompería al acabar el año. Es durante este flirteo cuando compone su obra más aclamada, Op. 9, Carnaval. Cabe destacar que la mayoría de las composiciones para piano de Schumann están formadas por movimientos que duran pocos minutos, o incluso menos de un minuto.
Conoció personalmente a Mendelssohn en casa de Friedrich Wieck en el año 1835 y le mostró su admiración; poco después conoció a Chopin. Durante toda su vida Schumann mostró hacia sus compañeros músicos una amistad sincera y una actitud de crítica constructiva, libre de rivalidades, algo poco frecuente en un crítico musical que también es compositor, esta actitud abierta y generosa le permitió ser el descubridor de Johannes Brahms cuando éste sólo era un joven y desconocido pianista de 20 años. Brahms se convirtió en íntimo amigo de Schumann  y se vio claramente influido por su música.

En 1844, tras un viaje a Rusia, atravesó un nuevo periodo depresivo y abandonó Leipzig para instalarse en Dresde.  Durante los años siguientes su salud mental y física se iba debilitando, lo cual no le impidió trabajar en multitud de obras, como sus dos Sonatas para piano y violín, su Concierto para violonchelo y orquesta y su única ópera, Genoveva. Incluso cuando, a partir de 1852, sus episodios de locura le mantienen convaleciente casi todo el tiempo, consigue aprovechar sus momentos de lucidez para completar su Misa, Requiem, Sinfonía en Re menor y Concierto para violín y orquesta. También destaca la presentación en 1846 de su Concierto para piano y orquesta en la menor, ejecutado brillantemente por su esposa, Clara, en 1846 en Leipzig, lo cual conllevó a su autor una fama aún mayor y más consolidada para la Historia.

Poco después le comenta a su hermano su deseo de suicidarse, ya que estaba angustiado por la epidemia de cóleraque asolaba Europa, asi es como  el 27 de febrero de 1854, Schumann se arroja al Rin y es rescatado a tiempo, pero su mente ya se ha perdido para siempre. Es internado en un sanatorio privado en Endenich cerca de Bonn, Alemania, donde permanece hasta su muerte el 29 de julio de 1856.  Fue enterrado en el cementerio viejo de Bonn, y en 1880 se erigió sobre su tumba una estatua de A. Donndorf.

jueves, 27 de septiembre de 2012

El Romanticismo Musical

Fue un periodo que transcurrió, aproximadamente, entre principios de 1820 y la primera década del siglo XX .
El Romanticismo como movimiento global en las Artes y la Filosofía, tiene como precepto que la verdad no podía ser deducida a partir de axiomas, en el mundo había realidades inevitables que sólo se podía captar mediante la emoción, el sentimiento y la intuición, es por ello que la música del Romanticismo, intentaba expresar estas emociones.


Ludwig Van Beethoven fue uno de los grandes compositores musicales del Romanticismo.


El Romanticismo

Es un movimiento cultural y político originado en Alemania y en el Reino Unido a finales del siglo XVIII como una reacción revolucionaria contra el Racionalismo de la Ilustración y el Clasicismo , confiriendo prioridad a los sentimientos, cuya característica principal es la ruptura con la tradición clasicista basada en un conjunto de reglas estereotipadas. La libertad auténtica es su búsqueda constante, esto se refleja en su rasgo revolucionario  que es incuestionable.
 
Debido a que el romanticismo es una manera de sentir y concebir la naturaleza, la vida y al hombre mismo que se presenta de manera distinta y particular en cada país donde se desarrolla; incluso dentro de una misma nación se manifiestan distintas tendencias proyectándose también en todas las artes.

Tuvo fundamentales aportes en los campos de la literatura, la pintura y la música.

Es propio de este movimiento un gran aprecio de lo personal, un subjetivismo e individualismo absoluto, un culto al yo fundamental y al carácter nacional. En ese sentido los héroes románticos son, con frecuencia, prototipos de rebeldía y los autores románticos quebrantan cualquier normativa o tradición cultural que ahogue su libertad  y la de estilo o incluso revolucionando la métrica y volviendo a rimas más libres y populares como la asonante. Igualmente, una renovación de temas y ambientes, y, por contraste al Siglo de las Luces, prefieren los ambientes nocturnos y luctuosos, los lugares sórdidos y ruinosos, venerando y buscando tanto las historias fantásticas como la superstición.




En la prosa, incluso el género didáctico  pareció renovarse con la aparición del cuadro o artículo de costumbres. La atención al yo hace que empiecen a ponerse de moda las autobiografías, también surgió el género de la novela histórica y la novela gótica o de terror, así como la leyenda.
El teatro fue el gran vehículo de comunicación de la expresión romántica, era el género más popular y a través de él se canalizaron sus anhelos de libertad y de sentimiento nacional.